La palabra «Buda» significa iluminado, lúcido o despierto, y es el sobrenombre que se aplicó a Siddharta Gautama.
Podemos comprobar cómo en la vida de Buda se cumplen los cuatro pasos que señalábamos en toda experiencia de conversión:
- La insatisfacción de la primera forma de vida, que podríamos llamar «de lujo y placeres», viene dada por la necesidad de salir fuera del palacio.
- Los «cuatro encuentros» plantean al príncipe Siddharta problemas que no puede resolver desde su existencia actual (¿por qué hay sufrimiento?, ¿cómo se puede remediar?), por lo que siente la necesidad de cambiar radicalmente de forma de vida (escapa por la noche del palacio, abandonando todas sus riquezas y a su familia).
- Sigue los modelos de vida santa que propone la religión india, uniéndose a cinco monjes que practican la ascesis más rigurosa (aunque después deberá abandonar o ir más allá de estos modelos para buscar su propio camino).
- Finalmente, experimenta el despertar o nacimiento a una nueva mentalidad (desvaloriza la anterior, a la que llama maya o ilusión, como si fuera un sueño).