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El juego de la oca es una doble y perfecta alegoría de nuestra existencia. Por un lado simboliza el laberíntico peregrinaje del yo hacia la verdad, hacia la identidad; el itinerario sinuoso hacia otros mundos más perfectos que éste. Por otro lado sirve de metáfora para la vida misma, llena de trampas y emboscadas, premios y castigos en que parece que todo se mueve por puro azar.
En este taller "viajaremos/ jugaremos" con la diversidad de tableros de la colección y si, en palabras de JULIÁN HERRERAS, "recordamos que por muchas veces que uno caiga en el pozo, o nos encierren en la cárcel, por muchas veces que nos perdamos en el laberinto, y aunque la muerte nos obligue a empezar de cero,…, el jugador, el caminante siempre es capaz de reaccionar, de intentar otra cosa, de forjarse una nueva expectativa, una nueva esperanza, de oca a oca y tiro por que me toca", querrá decir que estamos viviendo en un juego de la oca.
Cada participante puede traer su tablero de la oca o un viaje de búsqueda.
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