JESÚS

 

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Las primeras "Iglesias"

Pedro y Pablo  de el Greco

Iglesia: del griego “ekklesía” (Asamblea). Las Iglesias se constituyen en torno a los apóstoles después de la resurrección de Jesús. La de Jerusalén, agrupada en torno a Santiago se dirige a los judíos convertidos. Permanece ligada a la práctica de la Ley y frecuenta el Templo, predicando las enseñanzas de Jesús. Tendrá varias divergencias con Pablo, para quien la evangelización se debe de dirigir también a los paganos (no judíos o “gentiles”). Esta idea se desarrollará en Antioquia, en Siria, bajo la acción de Pablo. Muchas tentativas de solución tienen lugar en Jerusalén. Sobre esas dos visiones contrapuestas, el Concilio de Jerusalén decidió que los gentiles convertidos al cristianismo no estaban obligados a observar la Ley de Moisés, incluyendo las normas relativas a la circuncisión de los varones. Con el paso del tiempo, en definitiva, el proselitismo de Pablo en Asia Menor, en Grecia, en la cuenca mediterránea y en Roma acaba por imponer esta visión de una Iglesia universal, abierta a todos los hombres.

El alejamiento de las raíces judías se va produciendo poco a poco a la vez que se afirma cada vez más el surgimiento de una nueva religión, el cristianismo, en el que el centro es "Jesús-el-Cristo". La ruptura total entre el cristianismo y el judaísmo es efectiva sobre el año 135.

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