LA FE DE UN PUEBLO
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La Iglesia es un pueblo: el pueblo de los que siguen a Jesús. Un pueblo especial, pero un pueblo al cabo.
Como todo pueblo, la Iglesia posee su propia historia, su propia manera de ver las cosas, su propia fe… como su propia alma en la que los cristianos reconocen su identidad y encuentran sus raíces.
Y, como un pueblo especial, la Iglesia aporta algo también especial: quiere ser signo de salvación para todos los pueblos: porque su fe es la fe en el Cristo que salva.
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Sampedro J.C. et alii. Un Pueblo en Camino. Ed. Aguaclara. Alicante 1984.
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