ABC 1 mayo 2004 EDICIÓN IMPRESA - Educación
El Gobierno paraliza los itinerarios, la reválida y la alternativa a la asignatura de Religión
La ministra de Educación, María Jesús Sansegundo, asegura que la nueva ley combinará «calidad y equidad» y que habrá diálogo y consenso para lograr este objetivo.
R. BARROSO, M. ASENJO / MADRID.
«El proceso de reforma de la Ley de Calidad se inicia con el
objetivo de redundar en un sistema educativo de calidad y equidad para todos».
Así lo explicaba ayer la ministra de Educación, María Jesús Sansegundo, tras
el Consejo de Ministros en el que se estudió el decreto que dejará en suspenso
el calendario previsto de aplicación de la norma. Un nuevo texto que, según la
ministra, estará listo previsiblemente en mayo, momento a partir del cual se
abrirá un proceso de debate en «busca del mayor consenso», precisó.
Un decreto que pospondrá el calendario de aplicación de la ley de Calidad y
echará freno a algunas de las propuestas. Así, se revisará el sistema de
itinerarios previstos para 3º y 4º de Secundaria, una medida que, a juicio de
San Segundo, resulta «segregadora y no es la mejor solución. Hay que apostar
por prevenir antes que excluir y proponer medidas de atención a la diversidad
basadas en la optatividad y en actividades de refuerzo y apoyo».
Tampoco entrará en vigor el nuevo sistema de enseñanza de la Religión, que
preveía la creación de una alternativa no confesional, y que sería evaluable
y computable, al igual que su versión confesional. «Proponemos que se mantenga
como hasta ahora», señaló la ministra. Así, la Religión seguirá siendo
optativa y evaluable, pero no contará a efectos de expediente académico. Una
cuestión sobre la que la portavoz del Gobierno, Teresa Fernández de la Vega,
quiso precisar que el Gobierno parte del máximo respeto hacia la Religión,
pero que «las creencias no deben influir en la carrera profesional de los
alumnos».
Prueba única
La Prueba General de Bachillerato (PGB) que amenazaba con el fin de la
Selectividad también será revisada porque, a juicio de la ministra, «rompe la
conexión entre Secundaria y la Universidad» y permitía la posibilidad a cada
centro de realizar otra prueba de acceso, por lo que «habrá un consenso con
las universidades» para crear una prueba que no implique un doble examen.
También se revisará la consideración de la Infantil para poner el acento en
«recuperar el carácter educativo de esta etapa» -incluido de 0 a 3 años-
para potenciar el desarrollo de las habilidades básicas de todos los niños y
«prevenir posteriores desigualdades».
La reforma iniciada ayer no afectará a los aspectos de la LOCE que han entrado
en vigor en este curso y que seguirán vigentes: la repetición de curso y el
nuevo sistema de evaluación. A pesar de ser una de las medidas a las que
afectaría la paralización del calendario, el Gobierno no frenará la
implantación de la gratuidad en Infantil porque «es un objetivo que
compartimos todos», dijo Sansegundo, aunque señaló que se hará «un estudio
respecto a la financiación de esta medida».
En referencia al deseo expresado por algunas Comunidades de no aplicar ninguna
medida de la LOCE durante este curso, la ministra señaló que la voluntad que
ha observado es que «cumplirán la legalidad». Asimismo, y respecto a las
acusaciones de «fraude de ley» expresadas por parte del Gobierno regional
madrileño, Fernández de la Vega aseguró que «la ley es igual para todos» y
que «la competencia para fijar el calendario es del Gobierno».
Antes de fin de año
Respecto a los plazos de implantación de los nuevos cambios, la ministra
precisó que tras su aprobación en las Cortes -en octubre o noviembre- habrá
que completar el proceso con los desarrollos reglamentarios, por lo que las
reformas educativas no comenzarán a entrar en vigor hasta el curso académico
2006-2007. «La paralización de dos cursos académicos tiene que ser
suficiente», precisó Sansegundo, quien reconoció que las propuestas
necesitarán de consenso y diálogo con las Comunidades y sectores educativos y
que aunque «no es un reto fácil, merece la pena».