Tres de cada cuatro alumnos optaron en el curso 2008-2009 por la asignatura de Religión. Así lo precisó ayer la Comisión de Enseñanza y Catequesis de la Conferencia Episcopal, que recordó que de un total de 4,7 millones de alumnos escolarizados, 3,5 millones reciben la enseñanza religiosa católica.
A pesar de que esta materia sigue siendo una opción mayoritaria -al ser escogida por el 73,6 por ciento del alumnado-, el porcentaje de inscritos ha descendido un 2,1 por ciento con respecto al curso anterior. Esta leve bajada, que viene siendo una constante en los últimos años, es atribuida por la Conferencia Episcopal al trato discriminatorio que sufre la asignatura.