Aguirre niega los trienios a los profesores de Religión.

Pese a haber sentencia firme del Tribunal Supremo.
Los sindicatos denuncian el incumplimiento del fallo del TS.

Redacción - Religión Digital.com - Educación - 17-05-2011

(Redacción).- El Gobierno de Madrid de Esperanza Aguirre se ha negado a "reconocer y devengar nuevos períodos de antigüedad (trienios)" a aquellos profesores de religión que ya tienen reconocido este derecho por sentencia firme del Tribunal Supremo, según ha denunciado en una nota el sindicato Usit-Ep, que desvela el incumplimiento de la normativa por parte de la CAM. En la carta que han recibido estos docentes se dice lo siguiente:

"Con fecha 10 y 21 de diciembre de 2010 el Tribunal Supremo ha dictado dos sentencias de casación para unificación de doctrina. En consecuencia, a la vista de la doctrina jurisprudencial anteriormente expuesta, y en ejecución de la misma, se ha resuelto abonarle desde enero de 2011 exclusivamente los trienios que le fueron en su momento reconocidos en sentencia firme hasta el periodo reclamado, con los atrasos que corresponda, y durante el tiempo en que continúe prestando servicios, sin la posibilidad de que se le reconozca ni abone ningún nuevo trienio posterior a la sentencia firme que obtuvo".

Para el sindicato, "al pretender aplicar una doctrina posterior a la firmeza de las sentencias que han obtenido estos profesores, incumpliendo la parte dispositiva de las mismas, el aguirregazo se aplica sobre la nómina de estos profesores de religión descontándoseles los trienios devengados tras sus respectivas sentencias firmes".

USIT-EP reivindica el "principio de irretroactividad", lo cual haría inviable la afirmación de la Comunidad de Madrid, negando "la posibilidad de que se le reconozca ni abone ningún nuevo trienio posterior a la sentencia firme que obtuvo", cuando además, como ocurre en el presente caso, tales derechos individuales están avalados por sentencias firmes de los Tribunales de Justicia.

Estos trabajadores, profesores de religión en centros públicos de la CM, que han visto reconocido el derecho al devengo y a la retribución de la antigüedad por sentencia firme, están viendo frustradas y burladas sus legítimas expectativas puestas en la firmeza de unas sentencias; situación que hunde un poco más el aparente Estado de Derecho, más formal que real, por unos políticos que se pretenden por encima de la Ley, sin tener que responder por ello, ni política ni personalmente.